Con la llegada de la pandemia del Covid-19 los formatos de los eventos han sido redefinidos en un corto plazo de tiempo, y como consecuencia alguno de estos, han proliferado gracias a sus ventajas competitivas.

Dadas las circunstancias producidas a raíz de la llegada de la pandemia del Covid-19 a España a principios del año 2020, la organización de actos se ha visto obligada a reinventarse a marchas forzadas para poder adaptarse a los nuevos tiempos, lo que supone un gran desafío para toda la industria, ya sea en el ámbito público como en el privado.
En la entrada de esta semana voy hablarte de los eventos de proximidad, una tipología de actos que en estos momentos aporta unas ventajas competitivas diferenciales para aquellas entidades que los lleva a cabo.
LOS EVENTOS DE PROXIMIDAD
Es ya toda una realidad que los eventos se han redefinido, pero el impacto frente al cambio ha sido tan repentino que en muchas ocasiones no nos paramos a reflexionar qué ventajas competitivas nos aportan unos formatos u otros. Por ello, hoy quiero compartir una tipología que en el sector del protocolo local llevamos a cabo prácticamente a diario, los eventos de proximidad.
Galería de actos de proximidad realizados esta semana en el Ajuntament d´Elx
Los eventos de proximidad se caracterizan fundamentalmente por estar enfocados a un público local o provincial, lo que contribuye a la reducción de los desplazamientos. La comunicación de esta tipología de actos está basada en la proximidad/ cercanía en cuanto a la ubicación del público objetivo. Esta cercanía con los públicos meta permite al organizador una comunicación cercana, rápida y personalizada.
Una ventaja competitiva a valorar por el organizador, ya que en pandemia una de las medidas no farmacológicas más efectivas implantadas por los Gobiernos a recomendación de los especialistas, se centra en las restricciones de movilidad.
Aparejado al formato del evento de proximidad, se encuentran otras ventajas competitivas que hay que poner en valor hoy en día en la planificación de cualquier evento con el fin de mantener a la industria y demostrar la eficacia del evento en tiempos de pandemia.
- Una experiencia más emocional, traducida en la nostalgia del antes, y la esperanza del mañana, si ya has participado en algún evento, estoy segura que al recibir la invitación recordaste un evento memorable o entrañable, y a la vez, en tu mente aparecían pensamientos positivos acerca de estar un poco más cerca de la reactivación.
- La elección de venues al aire libre, como he expuesto en otras entradas del blog, el coronavirus SARS-CoV-2 se contagia de persona a persona a través de minúsculas gotas respiratorias «aerosoles» que las personas expulsamos por la boca al hablar, estornudar o toser y que toman mayor virulencia si están personas se encuentran en un espacio cerrado o con poca ventilación puesto que se comparte más aire, por ello cuando se optan por venues en exterior existe una probabilidad menor de contagio.
- Eventos más pequeños, al reducir el aforo de los participantes el event manager puede promocionar el evento como algo más selecto, posicionando la invitación y la asistencia del invitado como un privilegio, es decir, la tan ansiada «exclusividad».
- Contenido más atractivo, la reducción de aforo también aporta ventajas, ya que nos permite una interacción más personalizada y segmentada con nuestros stakeholders.
- La seguridad sanitaria, algo ya incuestionable y se podría decir totalmente integrado en el sector profesional de los eventos.
- Irrupción de las herramientas tecnológicas, como aliadas en la era Covid-19, con el fin de subsanar cuestiones como el aforo o la movilidad.
Todas estas ventajas competitivas que se deben tener muy en cuenta a la hora de organizar un evento de proximidad en la era de la nueva normalidad.
CONCLUSIONES
Los procesos de adaptación de un sector a marchas forzadas como consecuencia de un golpe inesperado, como nos está ocurriendo con la pandemia del Covid-19, nos puede llevar al desánimo o al desconcierto por lo desconocido, seguramente a largo plazo observaremos los aciertos y los errores, pero de momento, como se suele decir y es una frase que me gusta especialmente.
» EL QUE HACE, SE EQUIVOCA, MUCHO, Y MUCHAS VECES, PERO JAMÁS COMETE EL MÁS GRANDE DE LOS ERRORES, NO HACER NADA». Benjamin Franklin